Triatlón de Suances (19/Junio/2011) |
El 19 de Junio de 2011 corrí mi primer triatlón,
en Suances. Casi me ahogo en el agua y llegué a meta exhausto en 41ª posición,
con una sonrisa que no me cabía en la boca y con la satisfacción de haberlo
dado todo y más. Dos años después, el 14 de Julio de 2013, y
con la misma sonrisa en la boca que en mi primera carrera, llegaba a meta en
primera posición en el triatlón de Somo. Por el medio, 15 triatlones a mis
espaldas, y cientos de horas de entrenamiento para, por fin, ser capaz de
vencer en un triatlón. Los que me conocéis sabéis que detrás de esta victoria
hay mucho mucho sacrificio, tanto a nivel de esfuerzo físico, como mental.
Rendir académicamente, laboralmente y deportivamente es algo que me ha costado
bastante compaginar este año, aunque creo que he conseguido un equilibrio que
me permite disfrutar al máximo cada momento.
Triatlón de Somo (14/Julio/2013) |
Pero vayamos con la crónica:
El
domingo por la mañana me desperté muy temprano, la carrera iba a comenzar a las
11:15h y yo me encontraba más nervioso que otras veces. El día era espléndido
cuando llegamos a Somo y las sensaciones aún mejores. Tras pagar la inscripción
vi que faltaba gente buena como Félix, Felipe, Sergio Correa, Aja o Barroso, pero el nivel no era
bajo. En parrilla de salida iban a estar triatletas de la talla de Guillermo
Ruíz, Iván Cazorla, Fernando Román, Emilio Alonso, Lionel Joli, Miguel Ruíz… La
lucha se preveía interesante.
Tras
conversar con Iri, Sergio, Pablo Martín
y varios compañeros de mi equipo, nos dispusimos a entrar en boxes dejar el
material. Todo al milímetro: bici, casco, dorsal zapatillas de correr y de bici
y gorra. Todo listo para empezar.
Fuimos
caminando unos 600 metros hasta la salida. La natación consistía en un giro de
180º a la derecha nada más salir y después 600 metros nadando contracorriente
hasta la rampa que nos llevaría a boxes. La fuerte corriente frente a la rampa
de inicio impidió que muchos triatletas se atrevieran a entrar a agua a
calentar. En cuanto vi a Fede en la barca activé el sensor de alarma, ante lo
que se preveía que iba a ser una salida al despiste. Y así fue, sin avisar sonó
la bocina y me tiré al agua por la izquierda. Tomé la primera curva por fuera,
para evitar golpes, aún sabiendo que iba a recorrer mucha más distancia. Cuando
encaramos la recta de 600 metros que nos llevaría al final del sector, levanté
la cabeza y vi que iba muy muy muy retrasado, calculo que sobre el puesto
50. Fue entonces cuando empezó la
remontada. Me pasé el resto de la natación adelantando gente, a ritmo intenso
pero cómodo. A falta de 150 metros me pongo en cola de un grupo para coger aire
pero veo que van más despacio que yo y les adelanto para salir del agua con
algo de espacio.
Salgo
el 8º del agua y al tocar tierra e incorporarme me fijo en quien sale conmigo.
Pronto localizo a Fernando Román y a Miguel Ruíz, que me pasa como un cohete de
camino a boxes. Esta vez no va a ser una transición tranquila, pienso. Llego a
mi sitio y veo que Miguel y Fernando Román se habían quitado ya el neopreno.
Perder a estos dos hombres sería tirar a la basura la carrera, por tanto, casi
me arranco de cuajo el traje. Hago la transición más rápida de mi vida y me
subo a la bici a la vez que ellos. ¡Genial!
Nada
más salir empezamos a subir un repecho de unos 500 metros. Voy a rueda de
Miguel hasta que ataca Fernando Román, quien consigue aventajarnos unos metros,
pero al llegar al llano Miguel y yo nos entendemos y le pillamos rápidamente.
De esta manera formamos un grupo integrado por Miguel Ruíz, Fernando Román, el
junior Ansorena, el francés Lionel y yo.
Por
delante 14 kms para intentar recortar más de un minuto al dúo de cabeza,
Guillermo Ruíz y Cazorla. Nos ponemos a tirar Miguel, Román y yo y cuando
pedimos relevo al resto vemos que no hay colaboración. No nos lo pensamos y
seguimos tirando entre los tres. Al llegar al giro de 180 grados acordamos
pegar un tirón para soltar a los que iban a rueda. Salta Román, salta
Miguel y salto yo… pero nuestros compañeros de viaje siguen pegados como lapas
y el ataque no da resultado. Con el viento en contra durante toda la vuelta a
rueda se va muy cómodo y seguimos dando la cara los tres de siempre.
Llegamos
a boxes a 45 segundos de cabeza de carrera. Entro en la zona de transición como
un tiro coloco la bici y… ¿dónde están mis playeras? Me vuelvo loco buscándolas
y enseguida veo que me he confundido de sitio. Retrocedo 10 metros hasta mi
box, y entre los nervios y las prisas me cuesta más de lo normal ponerme las
playeras. Cuando me incorporo veo que los de mi grupo ya se han ido y el
último, Ansorena, me saca unos 15 segundos. Salgo en 7º lugar de boxes,
enrabietado por la cagada monumental que acababa de hacer.
Me paso un poco de
vueltas los primeros metros y en apenas
1 km doy caza a Alsorena y a Lionel. Al llegar a la durísima subida por las
dunas adelanto a Miguel Ruíz. Poco después me pongo delante de Fernando Román,
quien aguanta mi ritmo y pasamos a Iván Cazorla. Aún no había acabado la
primera vuelta y ya iba ¡SEGUNDO! Al inicio de la segunda vuelta veo al líder,
Guillermo Ruíz, que va tan solo 50 metros por delante. Bajo el ritmo, cojo aire
y me lanzo a por el primer puesto. A mitad de vuelta me pongo primero. Falta
tan solo 1 km y hay que apretar. En la penúltima recta miro para atrás y veo que
Fernando Román viene fuerte. Acelero, por si a caso, giro a la izquierda, veo
el arco de meta, levanto los brazos y disfruto del momento.
Hago los últimos
metros caminando entre los aplausos del público, cierro los ojos y para dentro
dedico la victoria a TODOS los que me han acompañado en este periplo del triatlón
durante estos dos años, sobre todo a los “Pablos” (Martín Sarobe, Iri,
Ibarguren), en SOMO también habéis ganado vosotros. A mis compañeros de
entrenos en el mar, en la bici y en la carrera a pie GRACIAS. A mi familia, a Vanesa y a mis amigos también
quiero agradecer su paciencia conmigo. Pero ante todo, hay una persona de la
que me acordé especialmente al cruzar la meta, y que ya no está con nosotros,
pero que desde el cielo me da más fuerza que nadie, mi abuelo, sé que no habría
persona más orgullosa que él. Llevo tiempo buscando este momento para dedicártelo,
así que ¡va por tí!
Una
vez en meta esperé, uno a uno a que fueran llegando todos mis amigos y
empaparme del ambiente de triatlón que se respira. Mis compañeros de equipo,
que desde que estoy en el Camargo me miman como a un hijo, fueron felicitándome
a su llegada.
Y
nada más, 15 carreras tuvieron que pasar para que en la 16ª llegara por fin el
triunfo. A partir de ahora a seguir igual: trabajando, estudiando, entrenando y
sobre todo, pasándolo bien con cada cosa que hago.
PD:
Mucho ánimo a Sergio Bolado que tuvo que retirarse con puntos en la mano al
rozar con piedras durante la natación. Enseguida vuelves a dar guerra.
Enhorabuena por el carrerón, y sobre todo por el premio al esfuerzo, sigue así tío, y seguirás progresando!!!
ResponderEliminarPedro Cantero (Bender)
Muchas gracias Pedro! Nos vemos en la siguiente y... Bienvenido a este mundillo!! ;)
EliminarEnhorabuena Pelayo, a pesar de cometer varios errores conseguiste la victoria, eso está muy bien.
ResponderEliminarEl Triatlón de Somo fue mi primera victoria en el Triatlón, ahora es la tuya y la primera no se olvida nunca.
Un abrazo
Muchisimas gracias Fer!
EliminarQue todo un campeón del mundo como tú me felicite ya es un honor, y si encima coinciden tus inicios con los míos la motivación que me da es máxima!
Seguimos aprendiendo ;)
Un abrazo!